19 Ene El variado mundo del sushi
En apenas unos años ha pasado de ser casi un perfecto desconocido a estar presente en la carta de numerosos restaurantes en los que, sobre todo, el buen pescado fresco es seña de identidad.
Bandera de la cocina nipona, el sushi, de forma muy resumida, se podría decir que es un pequeño y divertido bocado con raíces milenarias que nos permite degustar de la forma más intensa las excelencias de un buen pescado y, muy en especial, de nuestra gran debilidad, el atún rojo.
Una fórmula gastronómica cuya base es el arroz de sushi aderezado con vinagre de arroz y que, aunque muchas veces se desconoce, se presenta en numerosas e imaginativas variedades que, de forma escueta, te descubrimos.
El más conocido es el Nigirizushi, compuesto por la típica pequeña bola de arroz prensada sobre la que se coloca el pescado u otro ingrediente.
El Temaki, por su parte, es un pequeño cucurucho de alga en el que se introducen los distintos productos, mientras que el Gunkanzushi se compone de una base de arroz que se rodea con una hoja gruesa de alga de mayor altura para, seguidamente, poder introducir los productos, normalmente coronados con huevas de pescado.
Otra de las variedades más conocidas es el Makizushi, que se elabora extendiendo el arroz sobre láminas de alga nori para, seguidamente, añadir pescado u otros ingredientes. Una vez enrollado se trocea.
La misma elaboración pero de mayor tamaño recibe el nombre de Futomaki, mientras que si hablamos de un rollo más fino, en el que normalmente tan solo se introduce un ingrediente, nos referimos al Hosomaki.
El conocido como Uramaki tiene la peculiaridad de ser como un Makizushi envuelto al revés, de forma que el arroz queda por fuera. Así, una vez elaborado un rollo de alga con los productos en su interior, éste se envuelve con arroz.
Uno de los más imaginativos es el Kazari Sushi, consistente en rollos de Makizushi con los que se realizan diseños diferentes.
Por último, tenemos el Oshizushi, que se elabora presando sobre una caja de madera (oshibako) el arroz, el alga y el pescado, todo a capas, para luego trocearlo en pequeños cuadrados. Y finalmente el Chirashizushi, que se trata de un gran bol con arroz sobre el que se colocan los distintos productos.
En resumen, un divertido y sabroso universo de posibilidades en el que el atún rojo juega un papel destacado y al que muchos ya nos hemos vuelto adictos.
Fotos / Texto: Atunéate